Para los agentes cambiarios, empresarios y para el público en general, el tema del dólar siempre es de interés. Por el lado de los importadores, sus compras son realizadas con divisas, razón para que su precio tenga importancia, dado que una de sus opciones frente a una depreciación de la moneda local que tienda a encarecer las compras en el exterior en esa moneda en un mercado cambiario flexible, tiene como resultado la transferencia del incremento de precios hacia otros.
Naturalmente, debido a que muchos productos importados tienen demanda de tipo inelástico y los importadores quieren continuar en el mercado, estos no siempre querrán elevar los precios de las mercancías que traen del exterior, acudiendo en ocasiones a reducir sus niveles de ganancia, constituyéndose ese escenario en otra razón para apostar a la baja volatilidad en el mercado.
Respecto al lado del público, particularmente para los que tienen capacidad de ahorro, su interés radica en que deben estar atentos para preservar el valor de sus activos líquidos, y para ello, ante una depreciación, la conducta lógica es trasladar su efectivo hacia una moneda que le sirva de refugio a la preservación de su valor, al tiempo que le ofrezca la liquidez.
Dada la importancia dual, abordar el tema de la estacionalidad de la demanda de dólares resulta útil, pues el comportamiento como variable económica, en momentos específicos durante el año, ayuda a su predicción, bajo la modalidad del efecto de mes y facilita la toma de decisión al conocer de esa característica basada en un patrón; al tiempo que podría mitigar los eventuales impactos de la depreciación monetaria.
Conocer los topes máximos y los pisos mínimos de la demanda de dólares como patrón de estacionalidad, ayuda a la comprensión del comportamiento de la tasa de cambio en el mercado spot y también, de alguna forma, del tema de la presión cambiaria.
En la creencia generalizada expresada en opiniones que aparecen en los distintos medios de difusión, se da por cierto que el volumen y monto de las operaciones de dólares acontece en los meses coincidentes con la reposición de inventarios que procuran los diferentes sectores que conforman la actividad productiva y comercial de la economía nacional.
De lo anterior se desprende como un hecho “comprobable”, aceptado sin refutación, que en la economía nacional se producen dos picos de demanda en el mercado cambiario, el primero, en los tres meses de inicio de año y el segundo, para agosto/septiembre; generando esos escenarios presiones cambiarias que se traducen en escasez de dólares y aumento de su precio.
La evidencia de datos observados y registrados en forma sistemática por el organismo competente oficial, abarca 156 meses, equivalentes a 13 años, lo que permite disponer de un tiempo razonable para someter a comprobación y/o refutación la creencia generalizada en torno a la identificación del patrón de demanda de dólares por el efecto mes.
Al examinar las ventas netas totales de dólares en el mercado cambiario spot con frecuencia mensual, se puede apreciar, en el cuadro que sigue, que diciembre es el líder absoluto en volumen de ventas de la divisa estadounidense, con 13 meses, al encabezar exactamente todos los años de la serie 2004-2017; le sigue, en orden de importancia, marzo, con 7, y continúa con un empate en julio y agosto, con 6.
Durante los 13 años mencionados, el monto de operaciones trazado en el mercado spot, acumulado solo para diciembre ascendió a US$20,699 millones, casi doblando a marzo, que tiene US$11,364 millones, y luego julio, con US$8,988; lo que lo hace posicionarse en el tercer puesto del ranking mensual estudiado.
Ranking mensual por volumen de ventas de dólares En miles de millones US$
Mes
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
Frecuencia
0
2
7
3
5
2
6
6
4
5
3
13
Monto
-
3.4
11.3
5.0
8.0
3.4
8.9
8.7
6.2
6.8
3.0
20.6
Fuente: Elaborado por el autor en base a datos de la web del Banco Central de la República Dominicana.
Sin el propósito de establecer una línea de causalidad sobre qué variable podría estar incidiendo en la identificación del mes número 12 del año como el líder en operaciones de ventas netas del dólar, si la tasa de Inflación (TI) se ha comportado dentro del rango de su meta, e incluso, considerando la registrada en diciembre en la serie histórica 2004-2017, solo en 2007 alcanzó un 1.14 %, en el resto de los doce años se mantuvo por debajo del 1.0 %, en muchos casos muy distante y en otros hasta en niveles negativos de inflación.
Comportamiento tasa de inflación en diciembre, en %
Mes
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
TI
-1.4
0.9
0.7
1.1
-1.4
0.1
0.9
0.1
0.6
0.3
-0.7
0.1
0.9
0.9
Fuente: Página web del Banco Central de la República Dominicana.
Tomando en consideración la otra variable que tradicionalmente la literatura económica asocia al comportamiento de las operaciones de ventas de dólares, la que refiere al nivel de billetes y monedas en poder del público, valdría la pena referirse a su desempeño para diciembre de cada año, a fin de recabar la evidencia que se registra como dato observado, y determinar su posible asociación con el pico de la demanda de dólares en diciembre.
La cantidad de billetes y monedas en poder del público durante los 11 meses que anteceden a diciembre ronda el rango desde menos de un 1.0 % hasta un 4.0 %; en cambio, para el último mes del año se sitúa en alrededor de un 19.0 % de crecimiento mensual, pasando a ser el de mayor masa monetaria del período examinado; desempeño que podría ser un factor explicativo para entender el aumento de la demanda de dólares en el mercado cambiario spot.
En resumen, los hallazgos revelan que en el mercado cambiario spot dominicano, el mes tipificado como el patrón de la demanda de dólares, por ser el mayor en número de frecuencia, es diciembre, y el menor, febrero, empatado con junio; y el mes de mayor número de frecuencia con los más altos niveles de depreciación es enero, y el menor le pertenece al binomio marzo/abril.
De manera que la creencia generalizada de que “La mayor demanda de dólares acontece en los meses previos a la reposición de inventario” no está sustentada en corroboración basada en datos observados.
*Tomado en forma parcial del libro: Falsabilidad en la economía dominicana