La presidenta del Partido de los Trabajadores
Luchar por Lula libre es defender libertad de Brasil, afirma Gleisi Hoffmann
Brasilia, (Prensa Latina) Defender hoy la libertad del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva es defender la libertad de Brasil, afirmó la máxima dirigente del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann.
'El pueblo tiene memoria. Si usted pregunta quién hizo más por los brasileños, van a responder que fue Lula', destacó Hoffmann, quien participó este fin de semana en actividades en las cámaras municipales de Valparaíso y Luziânia, estado de Goiás (centro-oeste).
Lo anterior, agregó, 'porque fue la primera vez en 500 años de historia que la gente tuvo inclusión social en el país. Que el hambre fue política pública. Que el salario mínimo tuvo valorización y hubo pleno empleo'.
Para la diputada, 'es justamente por eso que la idea Lula crece cada día. Recordar al expresidente es recordar de un tiempo en que los brasileños eran la prioridad y el país tenía dignidad'.
La presidenta del PT, recordó, incluso, de una conversación que tuvo con Lula, en la que el exdirigente obrero apuntó: 'hay gente que se elige para gobernar y hay gente que se elige para destruir'.
Según Hoffman, el desgobierno de Jair Bolsonaro fue elegido, con apoyo del mercado financiero, para 'destruir la Constitución, nuestro legado y hasta el PT y los movimientos sociales'.
Alertó que el único objetivo del Gobierno es acabar con las políticas públicas en el área social.
En la cabeza de la élite del país, el pueblo es solo un detalle. Si come una sola vez al día, ya está bien, indicó la parlamentaria.
Reiteró que 'la economía está un caos, los propios bancos, que ayudaron a elegir a Bolsonaro, ya redujeron la expectativa de crecimiento. Fue del dos al 1,3 por ciento. Esto significa más desempleo, caída aún mayor en la renta de la población y más pobreza en Brasil', advirtió.
Lula está preso desde el 7 de abril de 2018 en la sede de la Policía Federal de Curitiba, sureño estado de Paraná, tras recibir una sanción de 12 años y un mes impuesta por el Tribunal Regional Federal de la cuarta región (TRF-4) por supuestos actos de corrupción.
El fundador del PT fue objeto en febrero de una segunda condena en la operación anticorrupción Lava Jato, esta vez a 12 años y 11 meses.