El autor es periodista. Reside en Monte Plata
El ex presidente Danilo Medina fue el principal beneficiario económico
de los sobornos que impuso en el país la empresa constructora brasileña
Odebrecth, por lo que debe ser procesado y sancionado y que devuelva al
Estado los recursos recibidos ilegalmente.
He visto con cierta preocupación como la justicia trata con acciones
evasivas cuando del expresidente se trata y todo el mundo sabe que este fue
el mayor beneficiario de los recursos económicos como sobornos que
entregó la empresa extranjera para financiar la relección presidencial de
Medina en el 2016.
Entonces no hay porque tratar al ex mandatario con paños tibios
cuando en realidad es un beneficiario directo de las acciones de corrupción
en que la firma Odebrecth prostituyó vergonzosamente a importantes
figuras del accionar políticos del país.
Todo el mundo sabe que la firma constructora brasileña tenía una
oficina en el Palacio Nacional próxima al despacho del ex presidente Danilo
Medina de donde presuntamente salieron los sobornos económicos a
connotados dirigentes políticos del gobierno y la oposición.
El pretender exonerar de culpa al ex presidente Danilo Medina es
pretender burlarse de la inteligencia de los dominicanos que desde principio
lo asocian al más grande escándalo de corrupción en todos los años de
historia republicana del país.
La justicia dominicana tiene un compromiso ineludible con el pueblo
de aplicar justicia aplicando las sanciones de lugar a aquellos que se
compruebe recibieron sumas millonarias como sobornos de parte de
Odebrecth e incautarles los bienes y devolverlos al erario público.