Jacqueline Guilamo
“Con Dios no se juega”
“Con Dios no se juega”
Por Jacqueline Guilamo
“El que todo lo Ve y todo lo Escucha”
En un pueblito muy lejano de la civilización, habia un hombre al que toda la comarca honraba, idolatraba y era como un Dios. El ayudaba a las familias con problemas, no tenia interés por el dinero, era una persona que resolvía cualquier inconveniente que se presentara, y buscaba la manera de crear empleos para que los hombres de trabajo no tuvieran problemas, les hacia prestamos a los pequeños jornaleros entre otras cosas.
En este lugar existía la ley; la cual dicho sea de paso, preguntaba primero a Don Jovino, (hombre inteligente por nacimiento), el líder de la comarca, como hacer las cosas para que se mantenga el pueblo siempre en armonía, todo era color de rosa en ese sentido, allí no habia necesidad de robar, de violar y de agresiones física; ya que Don Jovino tenia todo eso controlado.
Jovino tenia la costumbre de visitar las diferentes vivienda de la comunidad, para saber como estaban marchado las cosas, se tomaba un te, y conversaba con todo la familia en ese hogar, estos se sentían importante por este hermoso gesto de Jovino y lo endiosaban por esa cercanía con su gente.
Un día Jovino visito a su mejor amigo, quien además era su primer compadre, se sentaron en la enramada cobijada con unas hermosas yaguas, donada por Jovino, allí conversaban de cómo ellos podían ir un día a la ciudad para traer cosas nuevas a la comarca, sonreían haciendo sus planes, por los cuales su compadre solo le decía: “compadre a la verdad que este pueblo es dicho de tener un hombre tan inteligente como usted”!!!. El compadre de Jovino siempre hacia un corte en su conversación para alabar a Jovino. Además, en medio de conversaciones cada vez que pasaba una persona y miraba a Jovino allí decían: “Llego la bendición a su casa”, frases que elevaban a Jovino.
Hubo un minuto de silencio y Jovino en ese instante pensó “Tengo el Pueblo en mis Manos”, “Tengo el mundo en mis manos”, ese era el mundo de Jovino, ¿pero que paso en ese instante?, Jovino no sabia que Dios lo tenia en la mira, por las tantas cosas buenas que este hacia y el mismo Dios, ya le tenia algo bueno en el cielo para cuando este le tocara llegar. En ese momento Dios escucho esa frases de Jovino y se dijo así mismo, “te estoy dando yo todo ese poder para que haga las cosas bien hecha y ahora dice que tu tienes el mundo en tus manos”, Dios se sintió traicionado solo con este pensamiento, y decidió dar libre albedrío a Jovino, para que el hiciera lo que el quisiera y Dios no intervendría en nada, como muestra de que sin Dios Jovino no podía hacer nada bueno y positivo.
Cuando volvió la conversación entre Jovino y su compadre, Jovino llamo al hijo de su compadre y lo mando a buscar unas botellas para celebrar sus ideas, este corrió hacia la bodega de Jovino, para cumplir con el amo y señor de la comarca. Ellos seguían su conversación y de repente se acerco un hombre de avanzada edad y harapiento, se acerco a Jovino y le pidió que le diera dinero para el comer, y Jovino le dijo yo no tengo dinero y no puedo ayudarte, Jovino dijo: “déle usted algo compadre que yo no tengo na’ pa’ este podré infeliz”, dijo Jovino.
El compadre se mueve hacia la cocina y busca comida, pero ante le dice a su mujer: “ven acá que te tengo que decir lo que esta pasando” ella escucha el relato, y se sorprende al ver la actitud del hombre mas noble en la tierra, ella solo dijo se empezó a dañar el hombre”.
El compadre da de comer al anciano y este le responde lo siguiente: “gracias hijo mío usted ira al reino de Dios” y usted Jovino ira al mismo infierno”. Pero que Dios le venga, Don Jovino, este se sonrío a carcajada como nunca ante, o sea se burlo del anciano.
Después de esto, comenzó a verse cosas extrañas hecha por Jovino, el se estaba convirtiendo en un ser ambicioso e irresponsable, busco a los hombres mas fuertes para hacer un grupo de apoyo, exclusiva para el, prometiéndole que ellos serian igual que el; grande y rico, todos comenzó a ir mal, Jovino quería que todos trabajaran para el y su grupo de fortachones. Todo lo que Jovino deseaba ellos se encargaban de buscarlo a la fuerza, sin empotrarle nada, Jovino era el padrino de todos los niños y jóvenes del lugar, y si le interesaba una de estas jovencita a el no le importaba que estas fueran sus ahijada, las poseía a su antojo.
Una noche una joven hermoso ahijada de Jovino y quien estaba con ella forzándola a tener sexo, se sentía asqueada y con nausea al tener que estar al lado de un ser humano que daño su amor por su pueblo; ella tomo la decisión de cumplir con los deseos de su gente y enveneno la bebida de Jovino, este al tomarla comenzó a rodar como un pollo cuando le retuercen el cocote, mientra ella le decirle: “ muere por traicionar al pueblo que te dio el poder, muere por traicionar la bondad de gente que te dio todo su respeto y amor, muere por querer ser mas grande que Dios”. Allí quedo tendido Jovino, con sus grandes ojos abiertos.
En ese momento Dios con su gran libro y un corrector liquido, elimino el nombre de Jovino, y le demostró que en la tierra nadie puede tener el mundo en sus manos, que solo él (Dios), es quien da el poder y lo quita dependiendo de tus acciones en la tierra, que solo Dios es quien te dice lo que debe hacer, pero como el sabes que somos humanos y que por vivir mejor que otros nos convertimos en seres ambiciosos, egoístas, y nos olvidamos de donde venimos y de ayudar aquellos que en verdad te necesitan. Es buena analizarnos si en verdad estamos cumpliendo con los mandamientos de Dios o el ya nos dejo a nuestro libre albedrío. Para luego utilizar su corrector y borrarnos de su existencia.
JACQUELINE GUILAMO
BRONX, NEW YORK