Santo Domingo, RD.- El economista Guillermo Caram, exgobernador del Banco Central, planteó ayer que para normalizar plenamente la economía se requieren decisiones gubernamentales en consulta con agentes productivos privados y rediseñar la asistencia financiera y monetaria, en lugar del incremento de subsidios concebidos por el Banco Central como parte de estímulos gubernamentales durante la pandemia.

En texto entregado a la redaccion de este diario Caram señaló que se requiere una decisión “menos vacilante” del Gobierno sobre reapertura económica, únicamente supeditada al cumplimiento de protocolos sanitarios, conllevando eliminar las prohibiciones de operaciones totales o parciales.

Afirmó que no ha sido la reapertura económica la causa de la expansión de los contagios del coronavirus, “sino el incumplimiento de parte del Gobierno de disposiciones que ha adoptado para evitarlos, así como el mal ejemplo dado por autoridades encargadas de hacerlas cumplir, lo cual ha agravado la indisciplina social del pueblo”.

Dijo que deben rediseñarse los programas de asistencia monetaria, fiscal y financiera para compensar los aumentos de costos para cumplir protocolos sanitarios que tengan empresas a fin de que se mantengan la producción y los empleos.

Añadió que esta forma de asistencia mantendría producción y empleos con remuneraciones suficientes para que trabajadores puedan comprar, empresas vender, pagar impuestos, aumentar recaudaciones y reducir déficit fiscal. A continuacion el texto integro de sus declaraciones:

En relación al incremento de subsidios durante la pandemia concebidos por el Banco Central como parte de estímulos gubernamentales, creemos que nuestra economía demanda otro tipo de prerrequisitos para normalizarse plenamente.
 
Se requieren decisiones administrativas gubernamentales en consulta con agentes productivos privados y rediseñar la asistencia financiera y monetaria
 
En primer lugar, una decisión menos vacilante del gobierno sobre reapertura económica, únicamente supeditada al cumplimiento de protocolos sanitarios; conllevando eliminar las prohibiciones de operaciones totales o parciales.
 
(No ha sido la reapertura económica causa de expansión del contagio sino la falta de cumplimiento de parte del gobierno de disposiciones que ha adoptado para evitarlo, así como el mal ejemplo dado por autoridades encargadas de hacerlas cumplir; lo cual ha agravado la indisciplina social y vocación a la algarabía que lamentablemente caracteriza a nuestro pueblo.
 
En segundo lugar se requiere rediseñar los programas de asistencia monetaria, fiscal y financiera. Debería estar dirigida a compensar los aumentos de costos que tengan empresas para mantener su producción y empleos como consecuencia de medidas que hayan tenido que adoptar para cumplir protocolos sanitarios.
 
Este rediseño debe efectuarse en consulta con los agentes productivos.
 
Así sería mas efectiva la asistencia. Mantendrían producción y empleos con remuneraciones suficientes para que trabajadores puedan comprar,  empresas vender, pagar impuestos, aumentar recaudaciones y reducir déficit fiscal.
 
Estaría dirigida a preservar puestos de trabajo en lugar de suspender trabajadores. Así debe ser en  economía con vocación de equilibrarse y respetuosa de la dignidad humana en la cual se satisfagan necesidades en base al trabajo, haciendo innecesario el asistencialismo  oficial.