Miami.- Alicia Machado y El Puma protagonizaron una fuerte discusión durante la semana. Los ánimos en Top Chef VIP 3 se pusieron “color de hormiga” dentro de la competencia de cocina, porque muchos participantes no entendieron la forma tan dominante con la que Alicia se quiso imponer ante José Luis Rodríguez, llegando para muchos al “maltrato” y/o la falta de respeto.

Esto no le sentó nada bien ni al cantante, ni a su público, ni a sus compañeros, ni a nadie. ¡Nadie! Después del incidente vimos cómo el intérprete prácticamente se encerró en sí mismo. La tristeza de la situación pudo tanto con él que terminó derramando lágrimas, mientras José María Galeano y Paty Navidad intentaban reanimarlo.

¡Alicia pidió perdón!

Alicia Machado pidió disculpas, claro que sí. Está el video, que desde luego lo comprueba. Pero, haciendo uso de su personal derecho, “El Puma” no las aceptó.

¿Está bien?, ¿está mal? Responder cualquiera de estas preguntas es complicado, porque tanto está en su derecho de hacerlo como en no hacerlo. La situación como tal fue sumamente pública, televisada a nivel nacional e internacional, nada más y nada menos.

En este tipo de situaciones, después del desconcierto, después de la pena, después del sentimiento viene la racionalidad que te lleva a darte cuenta no sólo de los hechos sino del alcance. Es ahí en donde muy probablemente todo cambia porque pesa más el orgullo y gana connotaciones delicadas porque entonces llega la humillación.

La humillación golpea no sólo al ego sino la dignidad misma y son justamente estos golpes los que en ocasiones no nos permiten llegar a la reconciliación.

El rechazo del Puma no le sentó nada bien a “La Machado”…

Alicia ha explicado que intentó disculpase no una, sino en varias ocasiones con el señor y en todas recibió la misma respuesta. Explica que no sólo lo hizo delante de las cámaras, dijo que intentó llegar a él fuera de foco, pero pasó lo mismo. Ella habla de cómo considera que el ego pudo más y afirma que sobre su cabeza sólo está Dios, dando a entender que ella, probablemente, sólo le suplica al creador.

Sobre sus compañeros y la reacción que éstos han tenido, la venezolana es bastante tajante reconociendo que en este tipo de competencias se crean amistades y enemistades por igual, pero ella se mantiene firme en sus convicciones, aceptando que este es un reto más que está en la capacidad de sobrellevar.