Desde hace algún tiempo, América Latina y el Caribe están siendo protagonistas de un escenario a nivel tecnológico, económico, social y político muy favorable para el desarrollo de un sector tan relevante como lo es el de las energías renovables.

De hecho, es muy común leer que esta zona tiene todos los ingredientes para convertirse en el referente mundial de la energía del futuro: las energías limpias.

Un dato que apoya esta afirmación es que en la iniciativa Relac, o Latin America and the Caribbean, se estableció que, para el año 2030, el 70% de la energía consumida en estos países procedería de energías renovables. Algo que, de continuar por la senda actual, será fácilmente alcanzable.

Como podrás imaginar, se van a necesitar una gran cantidad de expertos en el sector para que todo esto se haga realidad. Es por ello que en EALDE estamos formando a profesionales que puedan dar respuesta a las exigencias que se plantean.

Datos sobre las energías renovables en América Latina

Un punto muy destacable y que afianza aún más la idea de que América Latina se convertirá en el referente mundial de energías renovables es que de los 20 países que cuentan con más de un 70% de energías limpias, esta región posee 12 de ellos. Estos son: Costa Rica, El Salvador, Colombia, Brasil, Nicaragua, Paraguay, Ecuador, Uruguay, Panamá, Venezuela, Belice y Guatemala.

A día de hoy, según la Organización Latinoamericana de Energía, OLADE, un 59% de la electricidad de la región procede de energías renovables. Con lo cual, llegar al 70% solo requiere un esfuerzo adicional. Hay buenas perspectivas sobre la mesa.

Veamos qué otros datos apoyan el progreso de las energías renovables en América Latina y la demanda de expertos.

Disponibilidad de recursos

Dada la riqueza de la zona, es posible generar electricidad a partir de diversas fuentes. Por ejemplo, de manera tradicional, la energía hidroeléctrica ha sido la gran protagonista. Pero, de un  tiempo a esta parte se están desarrollando otras como la geotérmica, la eólica o la solar.

En este sentido, Brasil es pionero en bioenergía generada a partir de recursos geotérmicos. Y Argentina, Perú, Chile, México y de nuevo Brasil, están trabajando en la producción acelerada de energía eólica y solar.

Inversiones

Entre los años 2010 y 2015, según la Agencia Internacional de las Energías Renovables, IRENA, se invirtieron $120 mil millones en la región. 

La situación energética actual y el auge de las energías renovables en América Latina hará que en las próximas décadas esta tendencia continúe e incluso aumente. Se prevé sobre todo que se haga especial hincapié en la energía eólica y solar. 

De este modo, hay fuentes que afirman que, para el año 2050, la inversión ascenderá hasta los $459 mil millones.

Reducción de costos

Otro de los elementos que está sustentando el desarrollo del sector energético en América Latina en cuanto a renovables es la reducción de costos. Esto hace que pueda competir con las energías tradicionales en la mayoría de países.

Esta reducción de costos se debe principalmente al progreso tecnológico, la automatización de procesos, la digitalización del IoT (Internet Of Things) y de la Inteligencia Artificial.

Sistemas de almacenamiento

El desarrollo de este tipo de energía en América Latina no solo depende de la generación de electricidad a partir de fuentes renovables, también de los sistemas de almacenamiento con los que se cuente para facilitar su gestión.

Este es quizás el reto más próximo a superar, pero no cabe duda de que así será. Es preciso impulsar el desarrollo de estos elementos para que el sistema energético sea posible y sostenible.

La inversión en energías renovables en América Latina será clave para que se logre.