Por José Zabala
NUEVA YORK.– En medio de la guerra verbal entre el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, y el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, cientos de migrantes mayoritariamente centroamericanos en busca de asilo en Estados Unidos y expulsados por el ejecutivo del estado sureño, seguirán llegando diariamente en autobuses a Nueva York, confirmaron autoridades locales el miércoles.

En la continuación de la llegada masiva de los migrantes, entre quienes también los hay de México, República Dominicana, Haití, Venezuela y otras islas caribeñas, ayer arribaron a la terminal de autobuses de la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey (Port Authority Bus Terminal) en la calle 42 y Octava Avenida en el condado de Manhattan, varios autobuses con docenas de los indocumentados que cruzaron el Río Bravo después de caminar cientos de kilómetros para llegar a Estados Unidos.

Los migrantes, según imágenes divulgadas por el medio Freedom News TV (FNTV), descendían de los autobuses con sobres amarillos en sus manos, suponiéndose que ahí traían sus solicitudes de asilo para procesarlas en Nueva York.

Algunos niños también bajaron de los autobuses acompañados por sus padres, quienes fueron esperados por una jauría de reporteros y agentes de la Autoridad de Puertos, al bajarse de los buses.

Al confirmar la llegada de los migrantes, el gobernador de Texas, en tono de burla, que “es un día alegre, comenzó la guerra, esperamos que Nueva York comience a ver la realidad con la que tenemos que lidiar todos los días en Texas”. Previamente el alcalde Adams calificó al gobernador como “dañino para Estados Unidos y el mundo”.

El Comisionado de la Oficina de Inmigración de la ciudad de Nueva York, Manuel Castro, confirmó que los migrantes seguirán llegando todos los días en los autobuses alquilados por el gobernador texano. La terminal de autobuses recibió tres autobuses adicionales de migrantes ayer miércoles por la mañana, quienes fueron también recibidos por activistas de la organización South Bronx Mutual Aid.

El grupo de ayuda mutua fue la única que apoyó a los inmigrantes cuando llegaron los primeros autobuses de Texas a la ciudad. A partir de ayer miércoles, 10 de agosto, se estableció un área de espera dentro de la terminal donde los solicitantes de asilo recibirán comida y una bolsa de mano con información.

Se vio a algunos solidarios dándoles dinero en efectivo a muchos de los migrantes que también recibieron ayuda con el papeleo necesario. Entre ellos estaba el venezolano Gustavo Méndez, quien realizó un viaje de 41 días desde Caracas, Venezuela, hasta Texas. Relató sobre los peligros y el miedo de encontrarse con carteles de criminales  en el camino. Dijo que caminó a través de la selva solo con la ropa que llevaba puesta.