Nueva York.- La defensa del alcalde de Nueva York, Eric Adams, solicitó este lunes a un juez federal denegar parte del caso de corrupción de su cliente, insistiendo que Hizzoner no aceptó sobornos cuando presionó a los líderes del FDNY para apresurar la apertura de la torre turca.

Los abogados calificaron el resto del caso presentado por la Fiscalía de Estados Unidos de Manhattan como algo “sin mérito”y atacó a la exempleada Rana Abbasova, quien se espera sea testigo clave para los federales.

“A pesar de que la acusación reproduce citas de mensajes, correos electrónicos y conversaciones sobre numerosos otros puntos, no alega ningún intercambio o conversación específica en la que Adams y el funcionario turco entraron en este supuesto acuerdo de quid pro quo”, dijo su equipo legal, a la vez que apuntó a una reciente decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos que ha debilitado las leyes anticorrupción.

Por su parte, los fiscales federales argumentan que el alcalde de NYC, en su cargo, presionó al Departamento de Bomberos de Nueva York para que se apresurara a abrir un nuevo edificio consular turco de 36 pisos sin una inspección de incendios en el mes de septiembre de 2021 a cambio de beneficios de viajes de lujo gratuitos y con enormes descuentos.

La acusación incluye mensajes entre Adams y el anterior comisionado del FDNY y precisa lujosas mejoras de vuelos y estadías en suites del hotel que Hizzoner recibió de patrocinadores provenientes de Turquía que viene desde 2016.

El cargo de soborno que los abogados desean que se desestime acusa al alcalde de aceptar sobornos para viajes costosos en 2021 y 2022 a cambio de presionar al FDNY para apurar la Cámara Turca pese a las preocupaciones por seguridad contra incendios.

Asimismo, Adams está acusado de alentar a benefactores turcos a canalizar dinero a su campaña de 2021 por medio de “donaciones ficticias” ilícitas y de obtener fraudulentamente $10 millones de dólares en dinero público para su campaña.

El demócrata, que se está en su primer mandato, ha negado rotundamente haber cometido alguna irregularidad y prometió luchar por el caso. Además, se ha resistido al aumento de las solicitudes de su renuncia tras su acusación.

La siguiente audiencia del caso está pautada para el miércoles y que le fue asignada al juez de distrito Dale Ho.

Los juristas de Adams, incluyendo el reconocido abogado Alex Spiro, expresaron en los documentos judiciales de este lunes que la Fiscalía de Estados Unidos no resaltó que el alcalde aceptó ningún presente específicamente a cambio de ejercer su influencia, tildando las acusaciones de “vagas”.

Los textos que Adams envió haciendo un llamado al entonces comisionado del FDNY, Daniel Nigro, para garantizar que la torre turca estuviera abierta a tiempo para una visita del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, son meramente mensajes “inocuos” que no equivalen a los que se conoce como “actos oficiales” necesarios para que un cargo de soborno se mantenga, aseguró el equipo legal.

La moción de alegato, que debido a que Adams solo era presidente de distrito de Brooklyn en ese momento, no tenía el poder suficiente para ordenar al FDNY que tomara medidas con respecto al edificio de Manhattan, informó New York Post.

Por otro lado, el excapitán de Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) había ganado las primarias demócratas para alcalde meses antes y se esperaba que ganara con facilidad ante el republicano Curtis Sliwa.

“El gobierno está afirmando efectivamente que Adams utilizó su potencial futuro puesto como alcalde para ejercer presión sobre los funcionarios, no el cargo oficial que realmente ocupaba”, dice la moción.

“No existe ningún precedente que respalde la idea de que un candidato a un cargo cometa un acto oficial al utilizar sus potenciales poderes futuros para presionar a un funcionario a que tome alguna acción”.

Los defensores del actual alcalde argumentaron que las acusaciones de que recibió beneficios en su viaje a Ghana luego de la inauguración del rascacielos podrían equivaler simplemente a “propinas”, que de acuerdo con ellos quedarían fuera del alcance de las leyes de soborno.

En este caso, la moción acusa a los fiscales de intentar criminalizar “las interacciones rutinarias de los funcionarios del gobierno” y asegura que la acusación “reemplaza las reglas éticas mesuradas con la fuerza contundente de la ley penal federal”.

Los abogados del alcalde de Nueva York denominaron el resto de los cargos penales de “igualmente carentes de fundamento”, alegando que todos derivan de “afirmaciones falsas” de un “miembro del personal con intereses personales y un interés personal”, haciendo referencia a Abbasova, exasistente y enlace con la comunidad turca.

Algunas fuentes explicaron que Abbasova está cooperando con las autoridades y un testigo clave para el caso.

Los juristas del alcalde no ofrecieron ninguna evidencia para apoyar su alegato contra ella, limitándose a afirmar que “se revelará más información en el curso del litigio”.