Por Agustín de la Cruz 
New York, EEUU.– Tal y como lo muestra el documento, 38 de los más importantes centros nocturnos de la parte noreste, están proponiendo la rebaja de un 30% en el precio de los artistas, por considerar que su tarifa no es recuperable en la puerta y es el propietario del establecimiento quien tiene que asumir todos los gastos del evento y de su centro.

No se explica que artistas que se venden entre 100 a 150 mil pesos en el país, donde además se presentan gratis, vienen a los Estados Unidos cobrando entre 8 a 12 mil dólares, al final es el público, el más perjudicado al verse obligado a dejar de disfrutar de sus artistas, por no poder cubrir las altas tarifas en la puerta y en la bebida.

Hace tiempo que los propietarios de clubes vienen alertando a los bookings sobre el problema, pero ha sido tan alarmante el incremento la crisis, que hoy piden un esfuerzo unánime para evitar el descalabro total de la industria.

Por su parte, quien lo trae (el booking) debe cubrirle visa, tickets aéreos, transporte, alojamiento, dieta, etc., además de tener que manejar la presión de un artista que insiste en regresar de gira sin tener ningún tema sonando, para luego terminar saturando el mercado.

Varias, han sido las reuniones entre ambas entidades, con la finalidad de lograr una fórmula que beneficie a todos, pero por su actitud se percibe que los artistas no han entendido el mensaje, ni la gravedad del asunto.

Así se observa en las películas que muestran a través de las redes sociales, donde alardean la adquisición de lujosos bienes luego de concluida su gira, pero eso es apenas una cara de la realidad, pues del otro lado de la moneda, hay unos propietarios de centros de diversiones que se sumergen en la ruina.

Los propietarios aseguran estar en la mejor disposición de escuchar y analizar posibles soluciones entre todas las partes, entendiendo que es tiempo ya de poner de un lado los egos y afrontar la realidad de un negocio que los está obligando a sustituir los eventos artísticos, por Dj, cómo una opción de poder garantizar la permanencia de sus establecimientos.