Un creciente incremento de las remesas que puntualmente envían los dominicanos residentes en el exterior a su país, es la más contundente evidencia de cuánto es el apego y aprecio de la diáspora para con su Patria...

...pero, por igual, los montos de ese incremento indican de hasta donde influyen en la economía y el desarrollo de la nación dominicana los criollos que, por diversas razones, han debido dejar el suelo patrio para vivir en otros países.

Estadísticas publicadas por este mismo medio indican que "...en el 2016 llegaron al país más de US$5,200 millones en remesas, a través de canales formales, equivalentes a un 7.3% del PIB."

Reputados colaboradores de La Nación Dominicana, los expertos economistas de la firma Deloitte, reportan además que: "Esas remesas también contribuyen a amortiguar el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos, que para ponerlo en perspectiva, representan el 70% del déficit comercial de bienes del año pasado.

"La mayor parte de las remesas la envían desde los Estados Unidos, donde se encuentra la comunidad más grande de dominicanos en el exterior. Aproximadamente, 70 de cada 100 dólares en remesas que recibe el país provienen desde EEUU, seguidos por España con un 15% del total...en el último año se recibieron más de 15 millones de transacciones de remesas desde EEUU, y unas 5.4 millones desde el resto del mundo."

Las remesas enviadas por nuestros compatriotas son decisivas para apuntalar la fortaleza de las familias dominicanas. Contribuyen no solo a sostener la alimentación de millares de hogares, sino también a hacer posible que miles de niños y adolescente en república Dominicana reciban el pan de la enseñanza.

Esas remesas se producen además, desde una comunidad que se ha convertido en la mayor reserva ética de la ciudadanía dominicana, aferrados como viven al sueño de su retorno al país de origen, se erigen en los ciudadanos más atentos a cuanto sucede en su lar nativo, hasta tal punto que, en muchas ocasiones, se enteran primero de las novedades de los suyos, antes que los mismos residentes en su país.

El crecimiento en cantidad y calidad de las remesas es un estímulo material y espiritual para una nación que busca esperanza para crecer, para vivir, para avanzar en medio de la turbulencia de la vida misma.

Salvador Sánchez

Director