Santiago, RD.- Las enfermeras del hospital regional universitario José María Cabral y Báez iniciaron ayer un paro de labores por tiempo indefinido reclamando de las autoridades del Ministerio de Salud Pública el nombramiento de más personal de enfermería y la terminación de la remodelación del centro de salud estatal, que lleva más de tres años.

Hablando en nombre de los gremios de enfermeras, Geraldino indicó que el paro de labores afecta los principales servicios del Cabral y Báez, aunque dijo que los casos de extrema urgencia serán atendidos.

“El Sindicato Nacional de Trabajadores de Enfermería (SINATRAE) y la Federación de Trabajadores de la Salud nos hemos vistos obligados a suspender las labores para exigir el nombramiento de enfermeras para el Departamento de Diálisis, las consultas, las emergencias y la Unidad de Cuidados Intensivos”, subrayó Geraldino.

Indicó que en total se necesitan 63 nuevas enfermeras en el Cabral y Báez para atender los servicios de los ciudadanos.

“En estos momentos no es posible que el Departamento de Emergencia se maneje con 20 enfermeras, cuando tenemos las solicitudes de servicios del 9-1-1, pero tampoco en los demás departamentos hay suficiente personal de enfermería”, precisó Geraldino.

Dijo que en el Cabral y Báez hay enfermeras que deben atender entre 30 y 40 pacientes al mismo tiempo, cuando los organismos internacionales de salud recomiendan que cada enfermera atienda tres pacientes.

“Señor Presidente de la República, es lamentable informarle que el sistema sanitario ha colapsado. Usted debe ponerle más atención al sector”, expresó el dirigente gremial.

Precisó que tanto el Ministerio de Salud Pública como el Servicio Nacional de Salud (SNS) no han dado cumplimiento a una serie de acuerdos que llegaron el año pasado, donde se contemplaba cubrir más de mil 800 enfermeras que fueron pensionadas y en todo el país no se han nombrado ni 20.

Por otro lado, Silvano Geraldino declaró que si no atienden las demandas que hacen, estarían en disposición de abandonar los servicios en el hospital regional universitario José María Cabral y Báez.